
Mademoiselle Chanel descubrió una nueva forma de belleza y tuvo la visión de combinar estilos.
Le encantaba el misterioso y exótico lienzo de Coromandel y dijo que pasaba el tiempo decorando las paredes de un departamento en París. Una fragancia exótica con notas ambarinas dulces y especiadas de benjuí e incienso.