UNA RAMA DE ROSAS CHAMPAGNE
Fleur de Parfum de Chloé es un “Eau de Parfum” para mujer con un delicado aire floral. Se trata de una nueva reedición de la famosa Chloé Signature, que poco a poco va aumentando su familia. Tras este perfume, una faceta floral empolvada, que mantiene la esencia del perfume original, pero ligeramente suavizada y empolvada, recreando la esencia de una flor en pieles en plena floración.
Esta fragancia fue lanzada en el año 2016 por los perfumistas Michel Almairac y Mylene Alran. En él descubrimos un aroma fresco y romántico, con facetas muy afeminadas, que nos invita a mostrar nuestro lado más dulce y tierno. Tiene un pequeño ápice de sensualidad muy discreta.
pirámide olfativa inicia con un frescor embriagador, gracias a la presencia de verbena, bergamota y uvas afrutadas, notas delicadas y ligeras, que forman un corazón floral, con destellos afrutados, la estrella indiscutible es la rosa, delicada y sensible, que se intensifica con destellos de grosella negra y melocotón. Finalmente, en su contexto se encuentra una lucha entre la sensualidad y la prudencia, que se equilibra con arroz, cedro y almizcle blanco.
Fleur de Parfum de Chloé es un “Eau de Parfum” para mujer con un delicado aire floral. Se trata de una nueva reedición de la famosa Chloé Signature, que poco a poco va aumentando su familia. Tras este perfume, una faceta floral empolvada, que mantiene la esencia del perfume original, pero ligeramente suavizada y empolvada, recreando la esencia de una flor en pieles en plena floración.
Esta fragancia fue lanzada en el año 2016 por los perfumistas Michel Almairac y Mylene Alran. En él descubrimos un aroma fresco y romántico, con facetas muy afeminadas, que nos invita a mostrar nuestro lado más dulce y tierno. Tiene un pequeño ápice de sensualidad muy discreta.
pirámide olfativa inicia con un frescor embriagador, gracias a la presencia de verbena, bergamota y uvas afrutadas, notas delicadas y ligeras, que forman un corazón floral, con destellos afrutados, la estrella indiscutible es la rosa, delicada y sensible, que se intensifica con destellos de grosella negra y melocotón. Finalmente, en su contexto se encuentra una lucha entre la sensualidad y la prudencia, que se equilibra con arroz, cedro y almizcle blanco.
